
La ergotamina, usada para tratar migrañas, proviene del hongo Claviceps purpurea. Este hongo, antes empleado en obstetricia por sus efectos sobre el útero, contiene alcaloides que inducen vasoconstricción. Hoy, bajo supervisión médica, su derivado ayuda a aliviar el dolor migrañoso reduciendo el flujo sanguíneo cerebral.